Balón intragástrico LEX-BAL
Descripción del Producto
Balón, confeccionado con caucho de silicona, material probadamente biocompatible, que se introduce endoscópicamente por vía bucal con el paciente sedado, y se llena con solución fisiológica hasta un volumen variable de 400 a 800 cm3, de acuerdo al tipo de paciente.
El Balón debe ser retirado luego de 12 meses de permanencia en el estómago y de existir la indicación podrá ser reemplazado por un nuevo Balón.
¿Cómo funciona?
El balón intragástrico es una carcasa esférica de silicona resistente con una válvula de retención adherida a su pared y un sistema de tubos para la transfusión de solución salina. El globo colapsado se coloca dentro del estómago como una sonda gástrica, sin ningún líquido en su interior. En el proceso de inflado del globo con solución salina, el globo adquiere forma de esfera. Según el volumen inicial del estómago, el tamaño del globo inflado varía de 400 a 700 cc. Cuando está dentro del estómago, el globo llena el exceso de capacidad del estómago. En consecuencia, se necesita menos comida para inducir la reacción de los receptores que envían señales sobre el llenado del estómago. Así, el paciente siente saciedad antes de lo habitual. Con el paso del tiempo, el paciente adquiere el hábito de consumir menos alimentos. Entonces el paciente se acostumbra al nuevo régimen de alimentación y nutrición que se mantiene durante un largo periodo después de la extracción del balón. El paciente sufre náuseas, llenado de estómago y molestias en la zona del epigastrio durante los primeros días tras la colocación del balón. Pero normalmente, entre 7 y 14 días después del procedimiento de colocación del balón intragástrico, el paciente casi no nota el dispositivo y lleva un estilo de vida normal. El balón se coloca temporalmente. El balón puede permanecer en el estómago durante un máximo de 6 meses y debe ser retirado posteriormente.
Ventajas
- El procedimiento de implantación del balón no se considera una cirugía. El balón se implanta por vía endoscópica, lo que lleva entre 10 y 15 minutos, bajo anestesia intravenosa
- El procedimiento es fácilmente tolerado por los pacientes y puede compararse con una endoscopia normal
- El paciente no tiene que cambiar su estilo de vida habitual
- Alta eficacia
- Menor riesgo de complicaciones